11 Jul Música y recuerdos en Seniors Ronda
Visita de la Rondalla Municipal
El pasado 16 de mayo, ¡recibimos una visita muy musical! La Rondalla Municipal de Ronda visitó nuestras instalaciones de forma totalmente desinteresada, con un único objetivo: alegrar a nuestros residentes con su bella música.
¡Así fue! Tanto residentes como trabajadores, se mostraron muy participativos y felices al escuchar temas tan conocidos como, ‘Cielito Lindo’, ‘Ansiedad’, ‘Eres tú’ o ‘dos gardenias’, entre otros. La mayoría de ellos conocían las letras y las cantaban emocionados a la par del grupo.
¡Pero no quedó ahí todo! Hubo una valiente que se aventuró a formar parte de la agrupación.
Sin duda, fue una mañana para el recuerdo en la que ¡disfrutamos mucho!
Estamos enormemente agradecidos a La Rondalla Municipal, por su gran gesto. ¡Muchas gracias!
Os esperamos pronto. 😉
El recuerdo de Josefa Rosado Domínguez
Os presentamos a Josefa, Pepa para los amigos, una de nuestras residentes más longeva y querida. A sus 95 años de edad, recuerda con un gran cariño su feliz infancia.
Nos cuenta que quería mucho a su familia y que estaba muy apegada a su padre. Siempre estaba deseando pasar tiempo junto a él y para ello, cada día terminaba rápidamente sus tareas, para así poder compartir actividades con él, al que admiraba mucho. ¡Era una de las cosas que más le gustaban!
Cada vez que Pepa terminaba el curso y estaba de vacaciones de verano, era costumbre de su familia mudarse a casa de sus abuelos en el campo.
Una última tarde de colegio, su padre fue a recogerla para que le acompañase a ir a por agua donde siempre solían ir. En esta ocasión, también se llevaron a la mula para que Pepa pudiera ir montada encima. Cuando ambos llegaron al pilar, su padre se paró en seco y ella pudo observar como cambiaba su semblante.
Josefa le preguntó: ¿Qué ocurre?
Su padre respondió: Mira Pepa, ¿sabes quién es aquel hombre tan alto que está bebiendo en el pilar? Es el bandolero Pasos Largos.
Ella, valiente y aventurera le pidió a su padre que la bajara de la mula, y cuando esto sucedió, salió corriendo hacia el bandolero. Nos cuenta como este temido hombre, la alzó para que pudiese beber en el pilar, ya que tenía 10 años y no llegaba ella sola. Cuando bebió, Pasos Largos, sin decir ni una palabra, la bajó al suelo, le apartó el pelo de la cara y la dejó volver junto a su padre.
Ahora recuerda con mucha emoción esta gran experiencia, en la que conoció al bandolero más temible de la Serranía de Ronda.
Pero esa niña valiente, tan vital, alegre e intrépida, no ha desaparecido, aún sigue habitando en el corazón de Pepa.
